Hace ya más de 50 años que la actriz Marilyn Monroe desapareció, pero su mito nunca ha muerto, y siempre ha sido constante inspiración en el mundo de la moda y de la belleza. Al igual que otras celebrities de la época, su excéntrica personalidad y su constante búsqueda de la perfección, la han catapultado año tras año en el top list de las actrices más deseadas. El paso del tiempo no hace más que acrecentar la devoción que el público siente como iconos como Marilyn.
Pero Marilyn no siempre fue Marilyn. Nació en Los Ángeles bajo el nombre de Norma Jeane y, tras varios trabajos como modelo, no lo consiguió saltar a la fama hasta que no se forjó su alter ego, Marilyn Monroe. Y si algo ayudó a Marilyn a ser la que fue, no fue otro que el cambio de look que sufrió, estilo que siempre mantuvo y que marcó un antes y un después, convirtiéndose el suyo en tendencia atemporal.
Quizá muchos no lo sepan, pero ese cambio llegó de la mano de Max Factor y, como tal, así reivindica la marca la posibilidad de cambio de toda mujer si se lo propone, en su nueva campaña.
¿Qué pensáis de esta nueva campaña?, ¿ha hecho bien Max Factor en elegir a Marilyn como embajadora?
