Chicos, como bien sabéis, hace un tiempo que comencé ya a hablar sobre gastronomía. Bueno, sobre comida como tal no, pero sí sobre algunos locales o algunas actividades a los que merece la pena asistir. En los últimos meses estoy asistiendo a locales bastante interesantes, casi todos descubiertos de la mano de mi amiga Paula Móvil y su vermutería (de la que ya os he hablado). Como ya os comenté, la vermutería se realiza todos los domingos de cada mes en diferentes locales de Madrid, así que es una buenísima manera de conocer diferentes sitios.
La Burla de Quevedo
Este es un sitio que me descubrió mi compi blogger Ángela Villarejo (deGuapas). Localizado en el barrio de Las Tablas, es una taberna-restaurante donde podemos tomar unos vinos, unas tapas y disfrutar de una comida increíblemente rica. Inspirados en Quevedo, ponen el arte y las letras en su carta, repleta de opciones para todos los gustos. Es un lugar para disfrutar de la compañía, de la bebida y de la comida. Las camareras son muy agradables y siempre te echan una mano si tienes alguna duda.
¿Quieres comer de tapas?, ¿prefieres un menú? o ¿tú eres de los de platos únicos? Seas de los que seas, podrás elegir lo que mejor te plazca. Yo soy de las de tapeo y, siempre pido diferentes platos para compartir. Tapas grandes y tapas más pequeñas, da igual, lo importante es probar todo acompañado de un buen vinito.
Ninguno de los platos que he probado me ha decepcionado. La ración de jamón acompañada por trocitos de pan y tomate está de muerte, al igual que el risotto, que tiene algo en su elaboración que me volvió loca (tengo que repetir ese plato). Aunque si tienes dudas, te recomiendo el cochinillo al horno. Yo no soy una loca de la carne, por no decir que no puedo comerla en grandes cantidades, y ese plato es para repetir y repetir.
Y el precio es muy razonable, por no decir que es bastante barato; por 16,90€ tenemos un menú degustación, que está disponible todo el día. Lo máximo que he pagado en este local, por persona, han sido 20€, y he salido realmente satisfecha y llena.
Soy Kitchen
Este es el último local que he conocido gracias a Paula y su vermutería. En esta ocasión, Ángela también me acompañó y quedó igual de encantada que yo. Soy Kitchen en un local situado en la Plaza de los Mostenses y, aunque en apariencia parece un local común, lo dirige Julio Zhang, un chef chino muy singular. Este local ha conseguido situarse entre uno de los más solicitados de la ciudad, y es que para poder conseguir mesa hay que reservar con dos meses de antelación.
¿Qué lo hace tan especial?, quizá sea por la mezcla de la cocina oriental con la tradicional española, o puede que sea porque no hay carta y el chef decide sorprenderte y es él el que te dice qué es lo que vas a probar en su restaurante. Sea el motivo por el que sea, su cocina se ha convertido en un éxito.
Roberto y Paula de @vermuteriapopup, Ángela Villarejo (@avillarejo) y Julio Zhang
El restaurante está situado en la planta alta, separada totalmente de la zona de la entrada, aunque la planta baja se transformará en breve en un punto de encuentro para tomar algo con amigos. Unos sofás, unos vinos, unos vermuts y tapas originales y creativas realizadas por el propio Julio, un manjar que merece la pena probar si no deseamos realizar una comida tan abundante como puede ser una cena.
Durante nuestra estancia allí, además de pedir unos vermuts (por supuesto) pudimos probar unas increíbles costillas aderezadas con algo que parecía ser una salsa entre barbacoa y soja (deliciosas), unos mejillones increíblemente ricos (¡cómo los recuerdo!), unas patatas bravas con un toque especiado, y un bao realmente bueno. Esto último era la primera vez que lo probaba y me gustó bastante.
Tengo claro que pienso pasarme a comer algún día, pero en cuanto Julio abra su planta baja será una de los sitios que visite con toda seguridad.